Mi vida es un revivir los momentos bellos, es una manera de acompañar mi soledad, si porque a veces, a pesar de estar acompañados, hay una soledad inmensa en el alma, entonces mi compañía son los recuerdos, aquellos que me transportan a lugares y sentimientos. Hoy en este dia frio de junio, me transporté a Sao Paulo, a aquellos dias de invierno, donde mi compañía tenía un sólo nombre, donde mi alegría tenía un objetivo, y ahí estaba yo en esas calles del recuerdo, con ese olor a guardado, con el perfume del jazmin de las calles, caminando por la Teodoro Sampaio, buscando un café en la Flor do Minho, o devorando libros en la biblioteca de la Universidad. Pero aquellas tardes eran diferentes, tenían un no se que , un algo que hoy no puedo reconocer, eran mágicas, eran hermosas...eran eso....eran...la magia de Sao Paulo y su gente que yo conoci y aprecié..
